Esta semana ha finalizado el Programa de Competencia Familiar, dirigido a familias con hijos y/o hijas de edades entre 12 y 16 años.
Durante 15 sesiones se han trabajado aspectos como habilidades de comunicación personales y dentro de la familia, saber identificar y atender las propias emociones y necesidades y las de los otros y cómo poner normas y límites a los hijos y/o hijas de manera adecuada. También, a aprender a resolver conflictos relacionadas con el uso y abuso de sustancias, uso de las tecnologías (móviles, videojuegos, etc.), afectividad o sexualidad. Al finalizar el programa los participantes recibieron la felicitación de la regidora de Servicios Sociales, Aina Amegual, por haber superado el programa y por su compromiso durante los tres meses de duración del programa.
Este programa está financiado por la Consejería de Asuntos Sociales y Deportes y supervisado por el Grupo de Investigación y Formación Educativa y Social GIFES-UIB. “Es un programa selectivo, por lo tanto, se dirige a familias que están entrando o que pueden entrar en situación de riesgo. Familias normalizadas que no han sabido poner límites claros y ahora se encuentran con adolescentes que no responden como esperaban, o familias con adolescentes que empiecen a presentar comportamientos que hacen ver que si no se reconduce la situación, se pueden encontrar en situación de riesgo (compañías no deseadas, comportamientos disruptivos…) y familias que simplemente quieren mejorar sus relaciones familiares y la cohesión familiar”, explica Maria Antònia Gomila, doctora del departamento de Pedagogía de la UIB y responsable del Grupo de Investigación y Formación Educativa y Social GIFES-UIB. Gomila explica que las familias están “muy agradecidas” por disponer de herramientas y estrategias claras que les permita introducir cambios en sus dinámicas. “Los hijos e hijas también lo agradecen mucho, porque sienten que sus padres les prestan más atención y se preocupan por tener una buena relación con ellos. Son sesiones muy emotivas”, admite Maria Antònia Gomila.

El programa, que es una adaptación del Strengthening Families programo (SFP), tiene seis objetivos básicos: mejorar las relaciones familiares, aumentar las competencias parentales, mejorar las competencias de hijas e hijos (actitudes y conducta); mejorar las habilidades sociales y emocionales de hijas e hijos; reducir o prevenir el abuso de alcohol y drogas y las adicciones en las tecnologías digitales y mejorar las habilidades comunicativas y asertivas al ámbito de las relaciones afectivosexualEs.