El taekwondo es un arte marcial de origen coreano que pone a prueba la disciplina, la paciencia y el respeto. En Marratxí, cerca de doscientos niños y niñas practican esta disciplina de forma segura y divertida en dos clubes diferentes.
En el polideportivo de ses Cases Noves, el silencio se rompe cuando los treinta niños del Club de Taekwondo Kumgang gritan al unísono el kihap —característico de esta modalidad— para iniciar el calentamiento. El maestro Baldomero Calmaestra fundó este centro hace 15 años. El club ha alcanzado grandes logros, gracias al entrenamiento constante y la dedicación diaria, como es el caso de Núria Quiñonero, una joven promesa que ya acumula importantes títulos nacionales e internacionales con tan solo 17 años y que forma parte del club desde los 3 años.
Pedro Pericàs es cinturón negro con 24 años y practica taekwondo en Kumgang desde los 7 años. Asegura que este arte marcial le ha permitido llevar un estilo de vida saludable, fruto de la exigencia física que implica en términos de resistencia, flexibilidad y fuerza. También destaca que «este deporte no entiende de edades, todo el mundo puede disfrutarlo». Lo comenta después de ejecutar un kata —una secuencia de movimientos— que repite constantemente con el objetivo de perfeccionarlo de cara al próximo campeonato, previsto para el mes de octubre.El Club de Taekwondo de Marratxí cuenta con más de cien niños y niñas, repartidos entre el IES Sant Marçal y sa Nova Cabana. Rafael Oliver fundó la entidad en el año 1991 y aún hoy, con 70 años, se pone el dobok —el quimono oficial— para transmitir a los más jóvenes todos los valores y técnicas de este deporte. Emma Garau, de 8 años, lo practica desde los 5 y asegura que «lo que más le gusta es el combate y la competición».
Un arte marcial que proporciona las herramientas necesarias para ganar confianza y autoestima. Pero también hay quienes lo empiezan a practicar siendo mayores. Es el caso de Biel, de 12 años, que comenzó hace tres meses. Cree que le ayudará a defenderse si alguna vez lo necesita, pero tiene muy claro que «fuera del tatami no se puede pegar». Los frutos del esfuerzo y la constancia de los entrenamientos semanales en el Club de Taekwondo se reflejan en los resultados obtenidos en los campeonatos. Xavier Ginard consiguió la medalla de plata en la categoría sénior en el prestigioso Keumgang Open, que se celebró en la localidad belga de Lommel; además, forma parte de la selección española.
Tanto el Club Kumgang como el Club de Taekwondo de Marratxí tienen el objetivo de eliminar el estigma de la violencia que aún rodea a este arte marcial, además de ofrecer a los jóvenes del municipio espacios seguros y saludables para su crecimiento personal y deportivo
